Claves para superar los nervios y estrés en Selectividad
LA ÚLTIMA PRUEBA
Parecía que nunca iba a llegar ese día y finalmente ya está aquí: la temida Selectividad. Sin embargo hay que intentar mantener la calma en todo momento porque es una prueba muy importante en la que nos jugamos mucho y los nervios pueden ocasionarnos alguna mala pasada.
Son días de mucho estrés y de mucha presión, en los que se está deseando acabar y poder de esta manera disfrutar de unas merecidas vacaciones de verano.
Pero lo importante es llegados hasta este punto, intentar continuar los pasos estipulados para realmente pasar un verano muy feliz.
Las claves o trucos que podemos emplear para mantener la calma y salir airosos de tanta tensión os los presentamos aquí y siempre los podréis utilizar en otros ámbitos de la vida en la que os hagan falta, pues desgraciadamente situaciones similares de ansiedad viviremos en muchas ocasiones.
Ante todo, respira, relájate, la Selectividad es muy importante pero lo es más, la nota de Bachillerato por lo que no te pongas histérica porque buena parte del trabajo ya está realizado.
Intenta leerte el temario por encima pero si estás saturada de tanta información, tal vez lo mejor sea descansar y relajarte con los compañeros porque no se trata de un estudio puntual sino de una evaluación continua y el trabajo duro ya se ha realizado durante el curso.
Por supuesto que los exámenes tienes que leerlos de arriba a abajo, tomándote toda la calma que necesites para poder acertar con la opción más adecuada a lo que controlas más.
En ocasiones es mejor tener pocas ideas pero muy bien estructuradas que miles de datos o cifras bailándote en la cabeza, se valora por eso mucho el saber organizarte y desarrollar los temas con precisión.
Obviamente para hacer esta prueba es necesario que estés descansado, asique nada de hacer locuras de pasar los últimos instantes en vela porque eso seguramente te acabe perjudicando.
No te obsesiones con el tiempo pero contrólalo que no te sorprenda y si eres de los más nerviosos igual es una buena opción llevar una tila en el cuerpo que nos calmára un poco más.
Y lo más importante de todo, sé tú mismo e intenta plasmar lo que sabes que seguro que es mucho más de lo que crees, intentando ignorar a los pesados preguntones que pueden arruinarte tu examen y sobretodo disfrutando del momento porque aunque se pasan muchos nervios, seguro que algún día lo terminas recordando con cariño.