El examen SAT se digitaliza. Esto es lo que debes saber.
Este artículo fue publicado originalmente por El 19.
Los estudiantes universitarios pronto tendrán la oportunidad de realizar el SAT como nunca antes. Por primera vez en Estados Unidos, el examen estandarizado se ofrecerá únicamente en formato digital a partir del 9 de marzo. También será más corto y adaptable, lo que significa que la dificultad de las preguntas de cada sección dependerá del rendimiento inicial del alumno.
En el último año, más de 220.000 estudiantes han realizado el nuevo examen digital a escala internacional, según el College Board, la organización sin ánimo de lucro que desarrolló el SAT. El 84% de los estudiantes y el 99% del personal declararon que prefieren el SAT digital a la versión de lápiz y papel, según declaró un portavoz del College Board a The 19th en un comunicado.
Esto es todo lo que debes saber sobre Alev Aydin, el padre del bebé de Halsey
'Doctor Extraño en el Multiverso de la Locura' acaba de presentar a un nuevo superhéroe. Esto es lo que debes saber sobre América Chávez.
"El SAT digital es un examen mejor, más flexible, más fácil de hacer, más fácil de administrar, más seguro y más pertinente", declaró el portavoz.
La renovación del SAT marca el comienzo de una nueva era para el examen de acceso a la universidad, concebido hace aproximadamente un siglo y ampliamente administrado en la década de 1950. Sin embargo, cuando comenzó la crisis del COVID-19, las instituciones de enseñanza superior de todo el país optaron por no realizar el examen, amenazando con dejarlo pasado de moda. Ahora, las actualizaciones del examen y el hecho de que las universidades de élite -entre ellas Yale, Dartmouth y el Instituto Tecnológico de Massachusetts- hayan restablecido las puntuaciones estandarizadas en las pruebas de admisión están suscitando un debate sobre los pros y los contras del SAT.
"Es sin duda más favorable al consumidor y se diseñó para intentar recuperar la cuota de mercado que había perdido el movimiento de los exámenes opcionales", afirma Bob Schaeffer, director de educación pública del grupo de defensa FairTest: National Center for Fair & Open Testing. "Es más corto. Los pasajes de lectura son... mucho más breves, menos aburridos. Se basa en un ordenador, por lo que se obtiene la puntuación muy rápidamente, en lugar de esperar semanas".
Pero, añadió Schaeffer, "eso no hace que sea una prueba mejor".
Los críticos del SAT afirman que es improbable que los cambios introducidos en la evaluación eliminen la prolongada brecha de género, ya que las chicas obtienen peores resultados que los chicos. Los estudiantes económicamente desfavorecidos, los jóvenes de color y aquellos con diferencias de aprendizaje también han obtenido históricamente peores resultados en el examen. Además, los detractores del SAT argumentan que no predice con exactitud el rendimiento de los estudiantes, especialmente de las mujeres jóvenes, en la universidad. Esto pone en duda, dicen, la conveniencia de exigirlo en la enseñanza superior, donde las mujeres jóvenes representan algo menos del 60% de los estudiantes.
Los partidarios del SAT, por el contrario, afirman que la nueva versión del examen tiene algunas ventajas. Por ejemplo, su menor duración puede beneficiar a algunos estudiantes con diferencias de aprendizaje. El hecho de que sea adaptable puede reducir la ansiedad que se siente al realizar el examen y el hecho de que sea digital puede ayudar a igualar las condiciones en matemáticas, ya que todos los estudiantes tendrán acceso a la misma calculadora en línea incorporada. Además, su uso en las admisiones puede ofrecer una ventaja competitiva a los estudiantes de grupos infrarrepresentados que destaquen con ella.
En lo que coinciden defensores y detractores del examen es en que, hasta que no se estrene en el ámbito nacional y empiecen a llegar los datos, no estará claro si el nuevo SAT cambiará las reglas del juego o será más de lo mismo para los casi dos millones de estudiantes que lo realizan anualmente.
Cuando Allen Koh se enteró de que el SAT se iba a digitalizar, se preocupó por cómo afectaría el cambio a los estudiantes a los que atiende. Koh es consejero delegado de la consultora Cardinal Education, con sede en Silicon Valley, que ofrece clases particulares, preparación de exámenes y apoyo para la admisión de estudiantes, muchos de los cuales compiten por entrar en universidades de élite. Como su clientela se extiende por los cinco continentes -África, Asia, Europa, Norteamérica y Sudamérica-, muchos ya han tenido la oportunidad de examinarse de la versión actualizada.
El SAT es ahora 45 minutos más breve, una ventaja para los estudiantes con menor capacidad de atención, dijo Koh.
"A muchos estudiantes con dificultades de aprendizaje les encanta la brevedad del SAT", afirma Koh.
Aportando una amplia documentación, los estudiantes con diferencias de aprendizaje como TDAH o dislexia pueden recibir más tiempo para hacer el examen. Este tipo de adaptaciones no son nuevas, pero Koh dijo que, dado que el examen solía durar tres horas, el tiempo extra para los alumnos atípicos hacía que el proceso se alargara hasta dos días.
"Era agotador", dijo. "Ahora, incluso los estudiantes con diferencias de aprendizaje, todos ellos pueden terminarlo en un día", dijo.
Diana Heldfond, consejera delegada de Parallel Learning, que ofrece apoyo en educación especial a distritos escolares de 15 estados, sabe lo que es que el SAT se convierta en una experiencia de un fin de semana. Ella tiene TDAH y dislexia y realizó el SAT en dos días cuando estaba en el instituto hace una década. Señaló que los estudiantes pueden optar a una serie de adaptaciones, aunque es una tarea que requiere diligencia.
"Una vez que los estudiantes tienen esas adaptaciones, pueden parecer muy diferentes", dijo Heldfond. "A algunos estudiantes se les puede conceder un 25% de tiempo extra, a otros tiempo y medio o el doble. En el caso de los niños que tienen tiempo y medio o doble, se reparte en un periodo de tiempo tan largo que el protocolo estándar es dividirlo en dos días. Esto hace que sea aún más difícil encontrar un centro de pruebas que realmente se adapte a eso. Se convierte en una prueba mucho más aterradora cuando, de repente, en lugar de ocupar tres horas de tu fin de semana, en realidad es tu fin de semana entero".
La mayor ventaja del SAT actualizado, según Heldfond, es su adaptabilidad. Ofrece una experiencia de examen personalizada que probablemente tranquilizará a los estudiantes con diferencias de aprendizaje, dijo, aunque señaló que algunos jóvenes de esta población podrían preferir la previsibilidad del examen en papel, en el que todos los examinandos responden a las mismas preguntas.
Al principio, Koh temía que el formato adaptativo fuera más estresante para sus clientes, pero ha descubierto que en realidad ha aumentado su confianza. Esto es especialmente cierto en el caso de los estudiantes que no intentan acceder a instituciones muy competitivas. La capacidad de adaptación del examen también reduce la ansiedad, añade.
"Si empiezas a equivocarte en algunas preguntas, las pruebas adaptativas harán que no aparezcan algunas de las preguntas brutalmente duras que te quiebran la moral", dijo.
Pero el mayor avance del SAT actualizado, según Koh, es que todos los examinandos utilizarán la misma calculadora integrada. Con el examen en papel, los estudiantes tenían que traer sus propias calculadoras e inevitablemente ocurrían contratiempos, desde que los dispositivos se quedaban sin pilas hasta que simplemente se olvidaban de traerlas, explica. Algunos estudiantes no podían permitirse las calculadoras, ya que un modelo avanzado puede costar 100 dólares o más.
Heldfond dijo que la calculadora es especialmente útil para los niños con discapacidades relacionadas con las matemáticas, como la discalculia, porque pueden practicar con ella en línea antes de hacer el examen real. Muchos estudiantes con diferencias de aprendizaje rinden mejor cuando pueden minimizar las sorpresas, dijo, y la calculadora en línea les ayuda a hacerlo.
Identidad más popular Los nuevos anuncios de Nike con Megan Thee Stallion y Sha'Carri Richardson demuestran que el fitness no es una cuestión binariaPor Angie Jaime
Cultura Hailey Bieber parece desmentir los rumores de divorcio de Justin BieberPor Sara Delgado
"Ahora todo el mundo tiene esa calculadora como parte de su SAT, así que eso es algo que, absolutamente para la equidad, es simplemente fantástico", dijo Koh.
La preocupación por que el SAT no sea equitativo ha provocado una reacción violenta en su contra en los últimos años. Manteniendo una tendencia pandémica, más del 80% de las facultades y universidades de cuatro años del país no exigirán el SAT ni su rival, el ACT, para la admisión en otoño de 2025, según FairTest. Sin embargo, el anuncio este año de que las principales instituciones reintroducirán el SAT en las admisiones ha llamado la atención sobre los posibles inconvenientes de excluir las puntuaciones de los exámenes estandarizados de las solicitudes universitarias.
Danielle Holley, presidenta del Mount Holyoke College y ex decana de la Facultad de Derecho de la Universidad Howard, declaró a The 19th que las altas puntuaciones en el SAT dan a los estudiantes socioeconómicamente desfavorecidos una ventaja en las admisiones. Como ahora la mayoría de los centros optan por no hacer el examen, las autoridades universitarias tienen que utilizar otros criterios para admitir a los estudiantes. A menudo, los factores alternativos considerados son el rigor de la escuela secundaria de un estudiante o las actividades extracurriculares, dijo.
Por Angie Jaime
Cultura Hailey Bieber parece desmentir los rumores de divorcio de Justin BieberPor Sara Delgado
"En los medios de comunicación nacionales se ha hablado muy poco del éxito de la Universidad de California porque gran parte de los medios se concentran en la Costa Este y se fijan en la Ivy League y las escuelas afines", afirma Schaeffer. "Pero para la inmensa mayoría de los estudiantes de bachillerato, los exámenes opcionales son la nueva normalidad, y no necesitan puntuaciones de exámenes para ir a la universidad en un futuro previsible. Ni el SAT, ni el digital ni el de lápiz y papel, ni el ACT".
Calificó el cambio del examen en línea de "cambio superficial" que desvía la atención de las investigaciones que concluyen que la nota media de los estudios secundarios predice mejor el éxito de un estudiante en la universidad que las puntuaciones de los exámenes estandarizados. Un reciente artículo del New York Times, en el que se argumentaba que la inflación de notas ha hecho que el GPA sea demasiado poco fiable para contar con él en las admisiones, excluía este tipo de investigación. En su lugar, se centraba en las conclusiones de investigadores de la Universidad Brown, la Universidad de California y el instituto político Opportunity Insights, con sede en la Universidad de Harvard, que indican que los solicitantes con puntuaciones más altas en los exámenes estandarizados tienen menos probabilidades de tener dificultades académicas en la universidad, independientemente de su raza o clase social.
En su estudio, los investigadores de Opportunity Insights hacían una advertencia: "Las puntuaciones de los exámenes estandarizados pueden no ser medidas puras del 'mérito' académico en la medida en que los niños de familias con ingresos altos pueden tener acceso a una preparación adicional para los exámenes u otros recursos que les permitan obtener puntuaciones más altas."
Schaeffer declaró a The 19th que los resultados del SAT miden en gran medida la clase social y que, cuando la investigación se ajusta a un grupo más representativo de instituciones de enseñanza superior, "no añaden nada significativo a la capacidad de predicción del expediente de bachillerato". También le preocupa que los defensores del SAT pasen por alto a menudo la histórica brecha de género del examen, que ha hecho que las chicas saquen peores notas que los chicos, sobre todo en la sección de matemáticas, a pesar de que las chicas sacan mejores notas que los chicos en los cursos de matemáticas. Las mujeres jóvenes también tienen más probabilidades de graduarse en la universidad que los hombres jóvenes a pesar de sus puntuaciones más bajas en el SAT.
"Hasta que no veamos datos de los nuevos exámenes que muestren las puntuaciones medias de hombres y mujeres, no sabremos con certeza si la brecha de género se ha abordado de alguna manera al pasar a un formato informático", dijo. "Todo lo que sabemos hasta ahora es que el College Board no ha hecho ninguna afirmación de que la brecha de género o la brecha racial o la brecha de ingresos se reducirá en la nueva prueba".
Bryan Nankervis, profesor jubilado de matemáticas de la Universidad Estatal de Texas, es autor de varios trabajos de investigación sobre las diferencias de género en el SAT, incluida su tesis doctoral. Según Nankervis, el SAT se ha presentado como un examen que predice el rendimiento de los estudiantes en el primer año de universidad. Pero la sección cuantitativa mide de forma desproporcionada la aptitud de los estudiantes para la geometría, la probabilidad y la estadística, asignaturas que la gran mayoría de los estudiantes de primer año de universidad no cursan a menos que se especialicen en matemáticas o planeen convertirse en profesores de matemáticas. Además, según sus investigaciones, los chicos suelen obtener mejores resultados en estas áreas de las matemáticas que las chicas, que tienen ventaja en álgebra.
Identidad más popular Los nuevos anuncios de Nike con Megan Thee Stallion y Sha'Carri Richardson demuestran que el fitness no es una cuestión binariaPor Angie Jaime
Cultura Hailey Bieber parece desmentir los rumores de divorcio de Justin BieberPor Sara Delgado
Nankervis no tiene esperanzas de que el SAT actualizado beneficie a las chicas. El menor tiempo de ejecución podría perjudicarlas, dijo, porque suelen tardar más en responder a las preguntas de los exámenes estandarizados que los chicos, que a menudo toman atajos. Un portavoz del College Board dijo que los estudiantes dispondrán de más tiempo por pregunta que en la versión en papel, pero no especificó cuánto tiempo más.
"En estos exámenes de opción múltiple, normalmente hay cuatro o cinco respuestas, y puedes descartar un par de ellas porque ni siquiera son correctas", dijo Nankervis. "Entonces se reduce a una o dos respuestas y muchas veces los chicos se arriesgan, por lo que tienden a tardar mucho menos en el SAT".
Otro posible inconveniente del SAT adaptativo es que los estudiantes no podrán volver atrás y cambiar sus respuestas, una opción que tenían en el modelo de lápiz y papel. Pero no estará claro si el nuevo examen ayuda o perjudica el rendimiento hasta el verano de 2025, cuando haya suficientes datos de subgrupos para revisar, dijo Schaeffer. Mientras tanto, FairTest se basará en los informes de los responsables de admisiones universitarias sobre las tendencias de los exámenes.
Aunque Heldfond dijo que la nueva versión del examen podría beneficiar a los estudiantes con dificultades de aprendizaje, le sigue preocupando que esta población estudiantil tenga que luchar para conseguir las adaptaciones que necesitan. Para los estudiantes que acaban de descubrir que son estudiantes atípicos, es difícil conseguir tiempo extra para hacer el examen porque el College Board exige un largo proceso de documentación, dijo. Las investigaciones han revelado que los estudiantes de institutos de élite tienen más probabilidades de obtener estas adaptaciones.
"Es necesario que los padres estén dispuestos a dedicar tiempo a defender los intereses de sus hijos", afirma. "Por supuesto, los padres están ocupados y no necesariamente tienen el nivel de educación en este espacio que incluso saben lo que necesitan para abogar por".
En general, según Heldfond, los exámenes estandarizados no se han diseñado teniendo en cuenta a los alumnos neurodiversos, y la actualización de ciertas características no cambia esta situación.
"En realidad, el nuevo examen adaptativo no parece tan diferente del anterior", dijo. "Simplemente está en un ordenador".
