La boda más graciosa del mundo
La boda más graciosa del mundo. Muchas personas limitan su vida a encontrar una persona con la que compartir el resto de su vida y si no la encuentran, eso es un fracaso absoluto.
Grace Gelder llevaba seis años soltera y para acabar con la soledad decidió casarse sí o sí. Como no encontraba a nadie se casó con ella misma, y sí, has leído bien: con ella misma.
La residencia más Happy del mundo
¿Quién es la mujer mas guapa del mundo?
Si alguien piensa que es poco romántico nada más lejos de la realidad porque se lo propuso a ella misma en un banco del parque del Parliament Hill y a la celebración acudieron unas 50 personas entre las que estaban sus amigos y familiares que apoyaron su decisión. Se llevó a cabo en una granja en Devon y su amiga Tiu fue la encargada de oficiar la ceremonia.
Como en cualquier boda, el vestido fue importante aunque Grace no le dio demasiada porque lo compró en un mercado local dos días antes del enlace.
En sus votos, Grace dejó claro que casarse con ella misma le daba muchísima fuerza y que su nuevo estado le reportaba una gran claridad.
Si te estás preguntando si hubo beso, la respuesta es sí. Gracias a un espejo, Grace besó a su reflejo para poner punto y final a la ceremonia.
No es algo loco que decidió en dos días porque cuando tenía 18 años, después de escuchar la canción de Björk Isobel que hablaba de una chica que se casó con ella misma. Lo encontró una locura pero después del viaje personal que llevó a cabo para encontrarse a ella misma se dio cuenta de que no era una idea tan disparatada y que ella misma lo haría.
Como explica en The Guardian, a pocos días del enlace empezaron a llegar las dudas pero al final todo quedó en nada porque en marzo contrajo matrimonio con ella misma. "Wooow, toda esta gente ha venido de todas partes hoy para celebrar mi boda conmigo misma" fue lo que pensó el día de la celebración.
¿Cómo te quedas después de leer esta historia?
