La brillantez estratégica del Mosad
La inteligencia es sin duda uno de los factores determinantes más importantes de una guerra. Ha habido numerosas ocasiones en las que un ejército inferior en número y equipamiento ha ganado gracias a la inteligencia, como en la Batalla de Bretaña, en la que el radar británico desempeñó un papel importante en la victoria de la guerra al permitir que los cazas aliados tuvieran tiempo suficiente para elevarse en el aire. Por esta razón, hoy en día, cada país tiene su propia agencia de inteligencia. Estados Unidos tiene la CIA, Gran Bretaña el MI6 y Rusia el GRU. Por lo general, las mejores agencias pertenecen a superpotencias ampliamente reconocidas, pero el Mossad de Israel a veces pasa por debajo del radar del ciudadano medio. Sin embargo, el Mossad merece reconocimiento, ya que es una de las agencias de inteligencia con más éxito del mundo y ha llevado a cabo muchas operaciones complicadas gracias a sus innovadoras estrategias de recopilación de información.
El Mossad es una de las tres principales organizaciones de inteligencia de Israel. Su función principal es la recopilación de información de inteligencia extranjera, pero en concreto: neutralizar las amenazas militares al Estado de Israel, hacer justicia a quienes han perjudicado al pueblo judío, recopilar información de inteligencia, tomar represalias contra los autores de actos de terror y ayudar a los refugiados judíos a llegar a la tierra de Israel (Unpacked Staff) (Noah Tesch). El Mossad se creó formalmente en diciembre de 1949. Al principio hubo luchas dentro de la organización y se produjeron muchos conflictos burocráticos. A esto siguió una operación fallida que acabó con la captura de una red de espionaje israelí en Bagdad, lo que puso aún más de relieve los problemas existentes en la organización. Estos problemas cesaron después de que el primer director dimitiera e Isser Hassar ocupara su puesto. Él es el responsable de convertir al Mossad en la exitosa potencia de inteligencia que conocemos hoy (Noah Tesch).
Desde entonces, el Mossad ha llevado a cabo muchas misiones influyentes y de alto nivel que han consolidado aún más su posición como una de las mejores agencias de inteligencia. Una de las más famosas fue la captura de Adolf Eichmann, uno de los oficiales de más alto rango de la Alemania nazi y responsable de la solución final de los nazis. El Mossad utilizó la tapadera que le proporcionaba el exceso de turistas por el 150 aniversario de Argentina para colar más agentes en el país y capturar ilegalmente a Eichman, ya que sabían que el gobierno argentino nunca lo habría extraditado. Los agentes israelies lo capturaron mientras caminaba de su casa al autobus. Lo transportaron drogándolo y disfrazándolo de trabajador de una aerolínea israelí que había sufrido una lesión en la cabeza (History.com Editors). Esta forma creativa y encubierta de capturar y transportar a Eichman sirve además para demostrar su eficacia y profesionalidad durante las operaciones encubiertas.
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Sin embargo, ha habido fracasos del Mossad, como el asunto Lillehammer (1973), que provocó la muerte de un civil marroquí inocente debido a una información de inteligencia errónea, que acabó con la mayoría del equipo del Mossad que participó en la operación capturado y juzgado por asesinato. Otro ejemplo más reciente es el ataque por sorpresa de Hamás contra Israel, que las fuerzas de defensa israelíes y el Mossad desestimaron como posibilidad (Bergman, Ronen). Aunque no podemos pasar por alto las operaciones fallidas, todas ellas quedan eclipsadas por las numerosas y desafiantes misiones que el Mossad ha llevado a cabo con éxito, especialmente su importante papel en la Guerra de los Seis Días a través de la operación "Moked", que en última instancia llevó a Israel a ganar una guerra con las probabilidades en su contra. (Editores de la Enciclopedia Británica)
Uno de los factores más importantes para determinar la calidad de una agencia de inteligencia es la variedad y eficacia de sus estrategias de recopilación de información. El Mossad hace especial hincapié en la inteligencia humana (HUMINT). No sólo cuenta con el segundo mayor número de espías oficiales y empleados del mundo occidental, sino que también dispone de una enorme red mundial de informadores, muchos de los cuales se concentran en Oriente Medio. En esta región los espías son colocados por la unidad Cesarea, una rama operativa encubierta creada en 1970 por un espía israelí (Younes, Ali). Simultáneamente, Israel ha creado la red Sayanim, que es una extensa red de ayudantes de etnia judía en todo el mundo. Estos ayudantes no suelen estar en nómina, lo que da al Mossad una gran flexibilidad y le permite evitar tener que rendir cuentas. La ayuda de estos ayudantes puede ir desde el suministro de información importante y clasificada hasta acciones sencillas como proporcionar asistencia médica o transporte sin necesidad de documentación legal, lo que permite a los agentes israelíes mantener su tapadera (Ellmer).
De entre las muchas agencias de inteligencia que existen en el mundo, como el MI6 y la CIA, el Mossad destaca sobre las demás por su alto índice de éxito y sus operaciones encubiertas de gran glamour. Es un testimonio del éxito que una organización bien organizada y profesional puede alcanzar incluso en entornos difíciles y seguir emergiendo como un faro de destreza estratégica y logros operativos. Gracias a sus numerosas e innovadoras estrategias de recopilación de inteligencia humana, su alto grado de profesionalidad y la dedicación de sus agentes a la protección del Estado de Israel, ha consolidado su posición como una de las mejores agencias de inteligencia del mundo.
