"Le estaba dando todas las posibilidades de sumar dos y dos y llegar a un número mayor que el infinito".

Para el tema de este mes sobre el crecimiento, elegí reseñar una novela que presenta tanto el crecimiento de un joven como el crecimiento/desarrollo de su afecto romántico hacia su huésped.

Llámame por tu nombre de André Aciman...

Se trata de una novela publicada en 2007 que sigue a Elio Perlman, un joven e inteligente adolescente que veranea en Italia, mientras florece una relación entre él y el invitado de verano de su familia. El resumen de GoodReads de la novela describe el verano que pasan juntos como "[lleno de] implacables corrientes enterradas de obsesión y miedo, fascinación y deseo, que intensifican su pasión a medida que ponen a prueba el terreno cargado entre ellos". La novela sigue el romance entre ambos, pero la verdadera belleza reside en la pasión de Elio. El joven y casi ingenuo anhelo de Elio por el mayor e inalcanzable Oliver se revela a través de su narración.

Reseña del libro "Happy Place" por Devyn Snapper

Reseña del libro La escuela del bien y del mal; un mundo sin príncipes

Mi decisión de leer este libro durante las vacaciones de primavera fue fácil porque siempre me ha gustado la adaptación cinematográfica que se estrenó en 2017. La lectura de la novela me hizo disfrutar mucho más de la película y aprecié mucho los pequeños momentos y referencias.

La escalada gradual y la combustión lenta fueron cautivadoras, y la mentalidad y la narración de Elio lo realzaron todo. Sus pensamientos eran comprensibles y sinceros; era dubitativo y amargado, como suelen ser los adolescentes, pero a menudo tenía extensos párrafos de su flujo de conciencia expresando sus hermosos y profundos sentimientos por Oliver. Muchas personas encuentran la relación problemática debido a la diferencia de edad, sin embargo, la novela lo sabe. Los efectos que su relación tiene en Elio debido a su corta edad se exploran a fondo. En lugar de romantizar o glorificar la relación, Aciman la retrata con gran realismo a través de los ojos del impresionable joven Elio. Y el lector es consciente de las partes desfavorables de la relación.

Recomiendo encarecidamente este libro a quienes disfruten o crean que disfrutarán de la película. La lectura de esta novela proporciona una comprensión y apreciación mucho más profunda de la película.

"Vino. Se fue. Nada más había cambiado. Yo no había cambiado. El mundo no había cambiado. Sin embargo, nada sería igual".

Para más reseñas de libros, visite Mi año de descanso y relajación, de Ottessa Moshfegh