Todo lo que se perdió de la Semana de la Alta Costura
La Semana de la Alta Costura primavera-verano 2024 arrancó con una explosión -perdón, flequillo, ya que Zendaya y su nuevo flequillo causaron un frenesí de paparazzi fuera de Schiaparelli- en la capital francesa. Fue un día de transformaciones capilares, con J Lo cortándose sus brillantes mechones de glamour para su propio momento en el front row de Daniel Roseberry, y Rihanna dando una lección de estilismo con gorro de alta costura en Dior.
Rihanna en Dior.
Stephane Cardinale - Corbis/Getty Images
Zendaya en Schiaparelli.
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También hubo mucha belleza llamativa en las pasarelas. La colección invitada de Simone Rocha para Jean Paul Gaultier dominó las redes sociales, gracias a la fotogénica reinterpretación que la diseñadora irlandesa hizo del archivo del provocador: camisetas bretonas confeccionadas enteramente con cintas, sujetadores cónicos al estilo Madonna convertidos en espinas en homenaje a las rosas que Gaultier regalaba a las modelos entre bastidores, y alforjas transparentes exquisitas gracias al ganchillo irlandés centelleante con piedras plateadas. "La alta costura es histórica y romántica, así que se trataba de introducir modernidad, realidad, un enfoque casi científico en este proyecto, para trasladarlo a la actualidad", dijo Rocha al referirse a la "intocable" artesanía en el momento actual.
Roseberry también pensó en reinventar la alta costura para un nuevo público al reflexionar sobre la IA frente a la artesanía en Schiaparelli. ¿El ejemplo más literal de sus reflexiones tecnológicas? El bebé robot creado a partir de viejas placas base y espejos, colocado en la cadera de Maggie Maurer, que desfiló en Londres estando embarazada en 2022.
Jean Paul Gaultier by Simone Rocha Alta Costura SS24.
Victor VIRGILE/Getty Images
Schiaparelli Alta Costura SS24.
Estrop/Getty ImagesArmani Privé fue la prueba de que las piezas excepcionales merecen la pena, literalmente. Ideó sus ondulantes vestidos de tul pastel con peplum, corpiños de cristal y fabulosos tocados de plumas de pavo real pensando específicamente en sus clientes de élite, tras enamorarse del término "Haute Couture en Jeu", que se traduce libremente como "la alta costura se divierte". "Era el momento de ser valiente, de asumir riesgos y, probablemente, de ser un poco menos Armani", declaró a Vogue Runway.
Pierpaolo Piccioli y sus capas Valentino adornadas en forma de bola de discoteca, sus vestidos "desnudos" en negro tinta y sus faldas turquesa de cuento de hadas también se inclinaron por la alegría en el corazón de la alta costura. "No hay que sentir el peso de la técnica y de lo hecho a mano porque, en última instancia, la alta costura consiste en la ilusión de la ausencia de esfuerzo", explica Piccioli sobre su enfoque. "La técnica debe desaparecer para no perder la magia: un mago sigue siendo mago sólo hasta que revela sus secretos".
Armani Privé Alta Costura SS24.
Valentino Alta Costura SS24.
Marc PiaseckiLa colección Chanel de Virginie Viard, inspirada en el ballet, también era ligera. Sus trajes de falda bouclé color almendra azucarada y sus vestidos espumosos, apropiados para una boda, hicieron que su fiel cohorte estirara el cuello y zapateara al ritmo del paisaje sonoro de Kendrick Lamar, que el rapero creó para la película que acompaña al desfile, The Button, escrita y dirigida por Dave Free. Cuando se trataba de producciones de gran presupuesto, Viard ganaba con su sencillez tan bonita.
Maria Grazia Chiuri también se ha centrado en lo ponible dentro de la artesanía, con una llamativa colección Dior de piezas lisas de algodón y moaré (un tejido que suele emplearse en diseño de interiores) inspirada, en parte, en el vestido La Cigale de Christian Dior de 1952 y en su alta costura aerodinámica, en la que Monsieur Dior comparaba las alforjas con las alas de un avión. ¿La diferencia clave en la colección de Chiuri que impulsa la casa en la primavera-verano 2024? La eliminación de cualquier "relleno" para permitir que las mujeres se muevan libremente. Rihanna, que estaba sentada en primera fila, hizo del moiré un fenómeno.
Chanel Alta Costura SS24.
WWD/Getty Images
Christian Dior Alta Costura SS24.
Stephane Cardinale - Corbis/Getty ImagesPara todos aquellos que estén pendientes de su dosis bianual de fantasía sin límites, Fendi, futurista, Giambattista Valli, caprichoso, y Viktor & Rolf, punk, se han complacido en ofrecer looks dignos de la temporada de premios, a la altura de las protagonistas de 2024. ¿La colección que nos gustaría ver lucir a Emma Stone y otros? La edición de Alaïa, asombrosamente sexy, con vestidos de punto milagrosamente tejidos a partir de un único hilo. Un signo de exclamación épico en el calendario.
Un momento final para Maison Margiela, que cerró la semana con un desfile romántico y muy teatral que ni siquiera las Kardashian pudieron eclipsar. Los vestidos pitillo volvieron a hacer acto de presencia, pero esta vez llegaron ceñidos hasta el extremo, con refuerzos protésicos que se sumaban a las siluetas de reloj de arena súper recortadas. Gwendoline Christie, que había nacido para encarnar el elegante traje de la Belle Epoque de John Galliano con maquillaje de muñeca de Pat McGrath y tirabuzones de Duffy, se unió a un reparto inclusivo, algo que decepcionantemente faltaba en otros lugares de un programa supuestamente progresista. Para un pequeño segmento de la industria que se basa literalmente en la confección a medida, aún queda mucho camino por recorrer.
Maison Margiela Alta Costura SS24.
Maison Margiela Alta Costura SS24.
Pierre Suu/Getty ImagesAunque el circo que rodea a la alta costura a menudo roba el protagonismo a las horas y horas de minucioso detalle que requiere, Galliano demostró que es posible casar la excelencia poética y el estilo impulsado por el espectáculo. ¿Los otros momentos que definieron la alta costura primavera-verano 2024 lejos del ruido (y del vestuario de J Lo)? El vestido bandeau con remolinos impresos en 3D de Alaïa, que fue una oda a las curvas de la mujer y al círculo de amigos de Pieter Mulier; la impresionante belleza cristalizada ideada por Thomas De Kluyver para la oda de Simone Rocha a JPG; y los excéntricos personajes de Maison Margiela, guiados por el director de movimiento Pat Boguslawski, que celebraron el individualismo por encima de todo. Y esto es todo lo que te has perdido de esta temporada de la Semana de la Alta Costura.
Este artículo apareció originalmente en British Vogue.
