Trucos para quitar el acné
TRATAMIENTOS ESPECÍFICOS
Todas en alguna que otra ocasión hemos vivido el típico momento de crisis porque teníamos una cita muy importante con el chico de nuestros sueños y a última hora contemplábamos atónitas ante el espejo que un indeseable enemigo se había afincado en nuestra cara.
Así son los granos, inoportunos como ellos solos, aguafiestas y muy muy desagradables pero la cosa podemos considerarla light si es de manera puntual –eso es signo de juventud-, nos tendremos que empezar a preocupar cuando se trate con todas las palabras de acné juvenil.
Esto puede suponernos un auténtico infierno, porque los jóvenes son sensibles y los cambios les afectan profundamente y el tener la cara como una paella no es plato de buen gusto para nadie.
Esta aparición viene como consecuencia de los numerosos cambios hormonales que se producen durante la etapa de la adolescencia por el continuo cambio que sufre el cuerpo.
En las chicas, la edad en la que esta enfermedad de la piel aparece con más fuerza se encuentra entre los 12 ó 14 años y por lo general en torno a los 20 tiende a desaparecer paulatinamente hasta hacerlo del todo.
En el caso de los chicos su aparición suele ser posterior, rondando los 15 ó 16 años siendo por lo general de una manera más severa y radical, además de poder sufrirlo en más partes del cuerpo aparte del rostro, como la espalda, glúteos o pecho.
Sin embargo, no debemos derrumbarnos por ello, aunque sea incómodo y en muchas ocasiones traumático porque en la actualidad los avances tecnológicos y farmacológicos han plantado cara para decir de una vez, stop al acné juvenil.
Tratamientos específicos
Para luchar contra este enemigo tan indeseable para los jóvenes, estos primeramente tienen que concienciarse de la importancia que supone el ser constante con el tratamiento que se empiece, debido a que suele requerir bastante tiempo para que tenga eficacia y muchos acaban tirando la toalla.
Hay muchos productos en venta para el tratamiento del acné, muchos de ellos con efectos no probados científicamente pero de manera general si nos adentramos en los tratamientos exitosos, estos proporcionan mejoras entre la primera y la segunda semana aunque los resultados más notables no se verán hasta pasados tres meses. Los tratamientos milagro que prometen resultados en dos semanas, son probablemente decepcionantes, no os fiéis.