La demanda de Blake Lively contra Justin Baldoni es una 'maestría en relaciones públicas', dicen expertos de la industria

• Blake Lively presentó una demanda legal contra Justin Baldoni, su compañero de reparto y director en "It Ends With Us".
• Lively acusó a Baldoni de acoso sexual y una campaña de represalias para dañar su reputación.
• Un experto en relaciones públicas dijo que Baldoni, quien negó las acusaciones, tiene "una batalla cuesta arriba" para tratar de ganar la demanda.

La demanda de Blake Lively acusando a su director y compañero de reparto de "It Ends With Us", Justin Baldoni, de acoso sexual y represalias podría terminar en un acuerdo o desarrollarse en un juicio muy público. De cualquier manera, los expertos en relaciones públicas y legales dicen que Baldoni tiene una "batalla cuesta arriba" por delante.

Lively dijo que asistió a una reunión durante el rodaje con Baldoni y el productor Jamey Heath para abordar el "entorno laboral hostil que casi descarrila la producción de la película".

En una declaración, el abogado de Baldoni, Bryan Freedman, calificó las afirmaciones de Lively como "completamente falsas, indignantes e intencionalmente sensacionalistas con la intención de herir públicamente y volver a contar una narrativa en los medios".

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Mike Fahey, fundador y director ejecutivo de Fahey Communications, dijo que la demanda de Lively fue reflexiva y bien cronometrada.

"Esta es una maestría en relaciones públicas", dijo Fahey. "Ella y su equipo esperaron y escucharon brillantemente. El equipo de Baldoni definitivamente está tratando de aferrarse a cualquier cosa para decir que esto es un intento de Blake por rehabilitar su reputación".

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En la demanda legal, Lively afirmó que después de abordar las preocupaciones en el lugar de trabajo, todas las partes acordaron varias estipulaciones, incluyendo la contratación de un coordinador de intimidad. Otros acuerdos incluían "no más mención de la 'adicción a la pornografía' de Mr. Baldoni o Mr. Heath" a Lively, y "no más mostrar videos o imágenes desnudas de mujeres, incluyendo la esposa del productor, a Lively o a sus empleados".

La queja de Lively alegó que la reacción en línea que soportó durante el verano fue el resultado de un "sofisticado plan de prensa y digital en represalia por el hecho de que la Sra. Lively ejerció su derecho legalmente protegido a hablar sobre su conducta indebida en el set, con el objetivo adicional de intimidarla a ella y a cualquier otra persona para que no revelaran públicamente lo que realmente ocurrió".

Dowlatshahi dijo que esta cantidad de detalles y evidencia en una queja es rara. "A menudo no tienes los mensajes de texto reales listos para presentar", agregó.

En su respuesta, el abogado de Baldoni llamó a la queja legal de Lively "otro intento desesperado de 'arreglar' su reputación negativa que fue adquirida por sus propios comentarios y acciones durante la campaña de la película; entrevistas y actividades de prensa que se observaron públicamente, en tiempo real y sin editar, lo que permitió a internet generar sus propias opiniones".

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La queja de 80 páginas de Lively atrajo la atención por su detallado relato de la supuesta estrategia de relaciones públicas destinada a dañar su reputación.

Fahey añadió que es común que los equipos de relaciones públicas anticipen un escenario negativo y discutan posibles situaciones. Sin embargo, agregó: "No orquestas un plan en profundidad preparándote para atacar a alguien en los medios".

Erik Bernstein, presidente de Bernstein Crisis Management, coincidió. "Esta no es la única forma de manejar una crisis de relaciones públicas", dijo. "Todos hacen su propia elección, pero creo que hay muchas personas en la industria que se sorprenderían con la militarización de la astroturfing aquí y la actitud general".

El impacto en la carrera y reputación de Baldoni probablemente será más severo. Desde que se conoció la noticia de la demanda, el actor-director ha sido despedido por WME.

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Dowlatshahi dijo que debido a que el caso ya es muy publicitado, "definitivamente iría a la ofensiva si fuera él, asumiendo que tiene alguna evidencia para ayudarlo".

Si Baldoni no tiene suficiente evidencia para defenderse públicamente, Bernstein sugirió que el actor permanezca en silencio hasta que la disputa se disipe.

"No quiero sobre-especular, pero si no tiene evidencia para realmente respaldarse y defenderse, esto podría alterar drásticamente el rumbo de su carrera", dijo Fahey. "No es una demanda pequeña. Estas acusaciones son muy, muy serias. Blake Lively no es un asistente de producción en el set. Blake Lively es uno de los nombres más grandes en Hollywood".

Fahey piensa que la disputa no pinta bien para Baldoni.

"El caso que ya se presenta es muy perjudicial para Justin Baldoni", dijo Fahey. "Así que ya tiene una batalla cuesta arriba para intentar ganar esta demanda".

Aunque la mayoría de los casos de esta naturaleza se resuelven, Dowlatshahi dijo que cree que hay una posibilidad de que la queja de Lively contra Baldoni se desarrolle públicamente, como lo hizo el juicio por difamación de Johnny Depp y Amber Heard en 2022.

"Si él quiere hacer de esto su colina para morir, luchará", dijo Fahey sobre Baldoni. "Llevará esto a juicio y podría ser como una situación de Johnny Depp/Amber Heard. Ese es tu escenario más dramático. Por otro lado, si Justin quiere que esto se disuelva silenciosamente, se resolverá y dejará que todo se desvanezca".

"Creo que el orgullo y la reputación dictarán lo que suceda a continuación".