¿Por qué la gente de TikTok cree en la magia?

¿Por qué la gente de TikTok cree en la magia?

Ya se trate de un filtro de inteligencia artificial capaz de convertir a cualquiera con un iPhone en un cazafantasmas, de supuestos avistamientos de gigantes o de los poderes aparentemente místicos de un espejo de baño, cada vez son más los usuarios de TikTok que parecen creer -o profesan creer- en la magia. Estos vídeos pertenecen a un género nebuloso y en rápida expansión dentro de la comunidad "espiritual" y "mágica". Algunos de los vídeos más populares hablan de vivir en "Matrix", la adivinación con espejos, fantasmas, Bigfoot y otros críptidos, y de "cambiar" entre distintos universos o realidades. Otros vídeos virales presentan imágenes de fenómenos cotidianos que el creador dota de misticismo narrando una explicación mágica de lo que acaba de filmar.

En un vídeo titulado "¿Fallo en Matrix? Lemon emoji", una mujer narra un vídeo de circuito cerrado de televisión en el que se la ve trabajando en la cocina de un restaurante, cortando un limón. Lo corta por la mitad, luego en cuartos, y se aleja para coger una bolsa de plástico en la que guardarlo. Cuando vuelve a su puesto, descubre que, a pesar de haberlo cortado, una mitad del limón permanece intacta. "¡He vuelto a cortar el limón porque el limón ya no estaba cortado!", proclama. "¡Estoy flipando!"

En otro ejemplo viral, un usuario pregunta cómo, cuando se presenta un objeto detrás de un trozo de papel colocado contra un espejo, el espejo "sabe" que hay un objeto allí. El vídeo suscitó una microtendencia de usuarios que intentaban "esconder" objetos detrás de un trozo de papel para discernir si el espejo realmente podía "verlo", mientras filmaban su asombro y conjeturaban sobre cómo era posible. Debe de ser magia. Esto es contrario a la intuición, a menos que conozcas o recuerdes principios de física del instituto.

Ninguno de estos casos fueron "fallos". Ese limón no parecía estar cortado del todo y se quedó pegado, explica un creador llamado Mitch en uno de sus propios vídeos. El contenido engendra contenido, y todo el proyecto de Mitch consiste en desacreditar los vídeos mágicos virales con racionalidad. En cuanto al espejo, los espectadores ven lo que creen que es una ilusión óptica creada por el reflejo del objeto.

Pero estas explicaciones racionales no siempre desacralizan el objeto para los participantes en la tendencia. Para algunos, parece seguir imbuido de una cualidad fantástica, emocionante, de otro mundo, tanto si no has visto el vídeo que lo desacredita como si lo has visto y te da igual.

Los vídeos de magia en #spirittok acumulan cientos o miles de comentarios que evalúan la veracidad del contenido, comparten experiencias y todo lo demás. La popularidad de este contenido también habla de las realidades materiales del mundo offline. En Estados Unidos, muchos miembros de la Generación Z tienen una movilidad reducida, en comparación con sus padres y abuelos. Proliferan los vídeos que pretenden ayudar a la gente a acceder al dinero, hechizarlo o manifestarlo. Más de un tercio de esta generación carece de afiliación religiosa, pero muchos de ellos están abiertos a prácticas espirituales como el tarot.

Una teoría es que, como seres humanos, tenemos tendencia a buscar patrones y explicaciones, a pesar de las pruebas lógicas. La parte de la psique que crea patrones nos permite funcionar, pero nos hace vulnerables al pensamiento mágico.

"Puedo reunir información y UPG (gnosis personal no verificada) a las que no tendría necesariamente acceso de otro modo", explica, "ya sea por limitaciones económicas (los libros son caros cuando no estás 100% seguro de que un camino sea 'el tuyo') o por falta de practicantes en persona accesibles para mí."

Jenna LaMere es una creadora de TikTok que se hace llamar "El Hada de la Sincronicidad". Se describe a sí misma como mentora espiritual y sanadora emocional. LaMere crea vídeos en los que comparte una palabra, símbolo o signo para que los espectadores se fijen en él y, cuando lo vean, sientan un "zumbido" de reconocimiento o conexión. Algunos ejemplos son las palabras "cojín" o "remolino". En sus vídeos, también reconoce que es simplemente divertido.

El componente de diversión y entretenimiento -a través de la creación y narración colectiva de mitos- es una función principal de muchos de los vídeos, según Becca, una TikToker que se describe a sí misma como médium y tarotista. "Los mitos y el folclore son probablemente mi parte favorita. Me encanta contar historias y compartir información", dice. "Creo que es una bonita combinación de historia y magia". Los vídeos de Becca sobre hadas y críptidos en los Apalaches hablan del folclore regional.

Dada la enorme popularidad y variedad de los vídeos de #spirittok, es imposible interrogarse a fondo o deducir una conclusión sólida sobre la base de fans. Parece que muchos espectadores solo quieren entretenerse.

Podemos fijarnos en la empresa de TikTok y podcast Jumpers Jump, presentada por Carlos Juico y Gavin Ruta, con 10,9 millones de seguidores en TikTok, como caso de estudio de la demanda del mercado con este tipo de contenidos frente a otros temas populares. Sus vídeos incluyen comentarios sobre magia, fantasmas y teorías de la conspiración. En uno de sus vídeos más populares, con 6,8 millones de me gusta, los anfitriones afirman: "Hay un TikToker que desapareció tras publicar que había visto un gigante en la naturaleza".

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A partir de ahí, dice, la evolución del contenido fue "natural". "Empecé a hablar de historias de fantasmas y de teorías de la conspiración. Simplemente porque eso era lo que me gustaba", explica, "con el tiempo, esos momentos del podcast se convirtieron en los más populares y hacia los que más gravitaba la gente. Pero seguimos hablando de esas otras cosas de emprendimiento y streetwear".

La línea que separa los vídeos de magia de los de conspiración es turbia, según han señalado varios creadores. Karen Douglas, profesora de psicología social en la Universidad de Kent y experta en la psicología de las teorías conspirativas, afirma por correo electrónico que "la teorización conspirativa está correlacionada con el pensamiento mágico y la creencia supersticiosa."

En un tuit viral de abril, en el que se citaba el vídeo del "fallo del espejo" que impulsó la tendencia, un usuario escribía: "el estadounidense medio cree básicamente en la magia en este momento. no es por tiktok, es porque el sistema educativo ha sido destripado. tiktok sólo hace que esto sea dolorosamente visible".

En el lado más serio, a veces el pensamiento mágico puede virar hacia un territorio conspirativo dañino y políticamente motivado, como hemos visto con el fenómeno QAnon. Algunos expertos en política educativa han establecido una conexión entre la privatización de la educación pública en Estados Unidos y el aumento de las creencias conspirativas.

En The Alienation of Fact: Digital Educational Privatization, AI, and the False Promise of Bodies and Numbers, el autor Kenneth Saltman, profesor de estudios de política educativa en la Universidad de Illinois Chicago, detalla la interrelación entre la privatización educativa neoliberal, la tecnología y las crisis contemporáneas de la verdad y la agencia.

Al describir las "condiciones educativas para las teorías de la conspiración", Saltman propone que "las teorías de la conspiración son una forma de teoría social (aunque mala teoría social) que tiene que ser enseñada y aprendida en lugar de mejores teorías sociales que comprendan la experiencia en términos de fuerzas, sistemas y estructuras sociales más amplias".

Según Becca, los vídeos de magia también pueden ser una forma de "evadirse" durante periodos de tiempo limitados. Uno puede elegir su propia aventura, hasta cierto punto. "Hay mucha gente que no sólo se deja llevar por el escapismo, sino que va tan lejos que llega a la psicosis", señala. "Y eso es algo que ya se ha visto en TikTok. Puedes ver a gente pasando por este proceso. Es algo que da mucho miedo".

Aunque la "psicosis espiritual" no parece ser un diagnóstico oficial, es un hashtag muy popular en TikTok. Estos vídeos -algunos con historias terriblemente tristes, otros advirtiendo a los espectadores de que deben mantener los pies en la tierra- existen en la periferia de este género amorfo, marcando los límites a los que la gente se empuja a sí misma y cómo estas cosas "funcionan" o sirven a los objetivos de una persona.

Los últimos años han traído consigo cambios dramáticos, como la pandemia de coronavirus y decisiones estremecedoras del Tribunal Supremo. Algunas personas pueden estar luchando contra la falta de acceso a recursos de salud mental. Otras pueden pensar que la psicología occidental o los principales medios de comunicación no han sabido reconocer y nombrar experiencias complejas, oscuras y conmovedoras por las que han pasado. Otros quizá sólo quieran una liberación rápida y divertida de la pesadez que nos rodea. En nuestro mundo impredecible y caótico, la gente busca respuestas dondequiera que las encuentre.

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