Mitos y verdades sobre la virginidad

CÓMO DISFRUTAR DE LA PRIMERA EXPERIENCIA SEXUAL CON SEGURIDAD

La primera vez suele estar llena de dudas y preguntas, pero también de miedos, expectativas y emoción a partes iguales. Tener claro lo que es verdad y lo que es un mito, te permitirá disfrutar de la experiencia con toda la seguridad.

La primera vez no va de sexo con penetración ni de rotura del himen, va sobre el enfrentamiento a una situación nueva que además está llena de mitos y creencias erróneas que pueden influir en la forma de vivirla. Lo nuevo, a veces da miedo y es completamente normal.

Diversual por Red17

Lo primero que hay que entender es que existen muchas primeras veces en cuanto a relaciones sexuales se refiere, ya que la virginidad como tal no existe, no es algo físico ni algo que “se pierde”. Aunque vayamos a hablar de virginidad como sinónimo de la primera vez que tienes una relación sexual, lo habitual es tener experiencias sexuales de forma progresiva, aprendiendo nuevas técnicas y formas de disfrutar del sexo, como por ejemplo, ell sexo oral o la masturbación, que también son relaciones sexuales.

No existe ninguna evidencia médica o biológica de la virginidad, sino que es un concepto que se ha construido de manera social y que tiene que ver con un concepto de sexualidad más conservador. Por eso nos gusta más hablar de primeras experiencias sexuales o de primeras prácticas.

Mitos sobre la primera vez

Antes de adentrarnos en los principales mitos, debes saber que la primera vez nunca va a ser cómo sale en las películas y es que se ha idealizado ese momento y la realidad dista mucho de cómo transcurre esa primera experiencia sexual. Lo mejor y más recomendable, cero expectativas. Cuando llegue el momento, trata de disfrutar la experiencia sin presión. Salga como salga, es tu primera vez y tienes ante ti una vida llena de experiencias que podrás disfrutar y recordar tanto como esta.

Las películas no deben ser tu referencia por lo que nunca debes basar tu educación sexual en la ficción ya que lo único que vas a conseguir es crearte una imagen de qué es el sexo y cómo debe ser que no es la realidad. Y como la primera vez es diferente para cada persona, lo que sí es importante para todos y todas, es estar preparados y preparadas y para eso hay que estar bien informados.

Tras la primera vez, hay cambios físicos

Mito. No hay ninguna evidencia científica de que existan cambios físicos después de haber mantenido relaciones sexuales, con o sin penetración vaginal. Tras la primera vez, sigues siendo la misma persona de antes.

 

Hay una edad ideal para la primera vez

Mito. No, no existe una edad perfecta ni adecuada, hazlo cuando y porque tú de verdad quieres, no por presión ni porque tus amigos y amigas ya lo han hecho o porque ya llevas X tiempo con alguien y “toca hacerlo”. No, no existe ni una fecha ni una edad estipulada para hacerlo. Lo único importante es que a ti te apetezca hacerlo y hayas encontrado a una persona con la que hacerlo cómodamente.

No existe riesgo de embarazo la primera vez

Mito. Es completamente falso. El riesgo de embarazo existe siempre que se practica relaciones con penetración o en cualquier práctica en la que el pene esté en contacto con la entrada de la vagina. Y ojo, no hace falta que se produzca la eyaculación para que pueda producirse un embarazo, el líquido preseminal, ese que se expulsa antes de la eyaculación, también contiene espermatozoides que podrían fecundar al óvulo.

La primera vez no puedes contraer ninguna ITS

Mito. Al igual que riesgo de embarazo, en toda relación sexual existe la posibilidad de contagiarte de una Infección de Transmisión Sexual. No depende si es la primera vez para uno o para ambos. Así que no solo en tu primera vez, sino en cualquier experiencia, es importante usar protección y los preservativos siempre serán la mejor opción porque además de ser un estupendo método anticonceptivo para evitar un embarazo no deseado, es el único método capaz de prevenir el contagio de ITS.

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Debes llegar al orgasmo la primera vez.

Mito. Ni la primera vez ni la segunda, ni nunca. No es necesario alcanzar el orgasmo ni para llamarlo sexo ni para disfrutar de la experiencia. El orgasmo es maravilloso, pero no debe ser la meta ni buscarlo a toda costa porque será la mejor manera de reducir las posibilidades de alcanzarlo.

Además, los nervios propios del primer encuentro sexual pueden hacer precisamente que sea más difícil alcanzarlo, así que no te sientas presionadx por eso.

La primera vez se sangra mucho

Se asocia la primera vez con la penetración y esta se asocia a la rotura del himen, pero debes saber que esta membrana pequeñita situada en la entrada vaginal que puede que se rompa con la penetración o puede que no se rompa nunca gracias a su elasticidad. También puede romperse antes de esa primera vez haciendo ejercicio o alguna actividad de impacto. En cualquier caso, cuando el himen se rompe no se tiene por qué sangrar.

La primera vez duele

Tener sexo va mucho más allá del coito, realmente es toda práctica sexual como la masturbación, sexo oral, rozamientos… y puede incluir o no la penetración. Además, la penetración tampoco duele siempre. Si existe suficiente excitación, relajación y lubricación, la vagina se dilata lo suficiente para que ambas personas lo disfruten sin molestias.

La información es poder, por lo que si tienes dudas, pregunta o infórmate, pero procura que sea de fuentes fiables y profesionales. Desconfía de “me han dicho que”, “he oído que”, “a una amiga de mi amiga le pasó…” ya que normalmente todas esas afirmaciones vendrán de personas tan inexpertas como tú que quizá consideren como verdades los mitos tan extendidos que hay en torno a la primera vez.

Ya sabes, aunque los primeros encuentros sexuales no siempre salen como se espera, lo mejor es no hacer caso a rumores y habladurías sobre la primera vez y experimentar la tuya propia.

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