Estudiantes de HBCU de Florida demandan al Estado por discriminación en la financiación

Nota del editor: El autor de este artículo es estudiante de la FAMU.

Cada primavera, estudiantes, profesores y antiguos alumnos de la Florida A&M University (FAMU) acuden al Capitolio de Florida en Tallahassee vestidos de naranja cítrico y verde hierba. La fanfarria anual, conocida como el Día de FAMU en el Capitolio, es un rito de iniciación, en el que las partes interesadas de la universidad cabildean con los legisladores, con el bramido de la banda de la escuela como música de fondo.

La universidad se fundó en 1887 y tuvo unos comienzos exiguos: Sólo contaba con 15 estudiantes y dos profesores. Desde entonces, la FAMU, la única universidad pública de ascendencia negra del estado y una de las dos universidades de concesión de tierras, se ha convertido en una institución de renombre. Aun así, los estudiantes de la FAMU han tenido que soportar la carga de las crisis de vivienda, el deterioro de los recursos y el agotamiento psicológico que conlleva hacer más con menos.

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Por ello, seis estudiantes de la FAMU han demandado al estado de Florida, al antiguo rector del sistema universitario de Florida y a la junta de gobierno del sistema universitario estatal por una supuesta financiación discriminatoria que, según afirman, se remonta a la segregación sancionada por el estado.

Los estudiantes dicen que la Universidad Estatal de Florida (FSU) y la Universidad de Florida (UF) en Gainesville, la única otra institución pública de concesión de tierras del estado, existen en un mundo dispar de oportunidades. La demanda alega que en 2019, el estado asignó a FAMU $ 11,450 por estudiante, un total de $ 110 millones, mientras que UF recibió $ 14,984 por estudiante, lo que equivale a la friolera de $ 785 millones.

La demanda también alega que la FAMU ha visto reducido su programa agrícola, mientras que la UF ha recibido "el control principal sobre la investigación, la educación y los servicios de extensión" y una "mayor parte de los fondos estatales y federales para la agricultura y la concesión de tierras". Según la demanda, el Estado también ha cedido parte de los recursos de la FAMU a la FSU, otra institución de Tallahassee. En 2015, según la demanda, el Estado retiró unos 13 millones de dólares de los ingresos generales de funcionamiento de la FAMU y trasladó la supervisión de esos fondos a la FSU.

Nota del editor: Esta conversación ha sido condensada y ligeramente editada para mayor claridad.

Nyabi Stevens: Recuerdo que en una de las clases de mi profesora uno de los ordenadores tardaba una eternidad en cargarse. Dijo que había estado en la misma clase en su licenciatura, hace un par de años, y que era el mismo ordenador. En general, sabemos que hay muchas cosas que no están actualizadas y que pueden causar problemas, [como explicamos] en la demanda. Vemos estas responsabilidades de primera mano.

TV: ¿Cuáles son algunas de las consecuencias de la falta de financiación de las que ha sido testigo durante su experiencia universitaria?

NS: Ha habido muchos estudiantes de primer año admitidos en la universidad y, por supuesto, tienen que quedarse en el campus el primer año. Nuestros estudiantes de segundo, tercer y último año pueden necesitar acceder a ese alojamiento porque no tienen coche, pero hay falta [de espacio]. El semestre pasado, y el año pasado en general, tuvieron que encontrar a los estudiantes lugares para alojarse fuera del campus debido a la falta de viviendas en el campus. Son muchos los conflictos que conlleva no poder estar en el campus como estudiante universitario, incluso llegar a tiempo a clase.

FayeRachel Peterson: Como estudiante de maestría, tengo que participar en la investigación. Ha habido problemas por no disponer de ciertas máquinas. Estoy en el laboratorio y utilizo muchas máquinas necesarias para la esterilización. No están disponibles. ¿Por qué? Porque están estropeadas y no hemos tenido fondos para conseguir una nueva.

TV: ¿Cómo afecta eso a su moral y a la de sus compañeros?

FP: Es descorazonador oír a los estudiantes decir "voy a dejarlo" en lugar de decir "voy a cambiar de universidad". Tenemos que terminar, pero al mismo tiempo, la gente no entiende que cuando haces un máster, no se trata sólo de terminar las clases. Tienes que terminar la investigación, y si no terminas la investigación, vas a estar aquí otro año, y otro año, y otro año.

Sueño con lo que quiero hacer.... No quiero acabar atrapada en la universidad porque no tenemos financiación. A veces es una mierda, lo reconozco. Me duele.

TV: Sabemos que este problema no es exclusivo de la FAMU. Observamos una financiación insuficiente en todas las HBCU del país. También parece que estamos en medio de lo que llamamos "un renacimiento de las HBCU", con la vicepresidenta Kamala Harris como alumna de una HBCU y un aumento general del reconocimiento. ¿Qué se siente al soportar una infrafinanciación histórica en un momento en el que también se celebra a las HBCU?

FP: Casi da la sensación de que la gente no es sincera. No es un momento honesto. Ves a los nuestros ganar y quieres animar a todo el mundo, pero a veces sientes que no puedes animarte a ti mismo. Duele mucho cuando te encanta ver ganar a tu gente, pero no puedes formar parte de ese grupo.

NS: Ese reconocimiento es bueno, y está muy bien que se haga hincapié en las HBCU, porque somos un trampolín para mucha gente negra con estudios. Mucha gente cree que para recibir una buena educación tiene que ir a una [institución predominantemente blanca]. Las HBCU tienen el mismo acceso, sólo que a veces no tenemos todo lo necesario.

Sin embargo, mucha gente de alto pedestal se centra en el reconocimiento. Lo importante es el trabajo de base. En lo que hay que centrarse es en la financiación. Hacemos mucho más con lo que tenemos, que es menos, pero ¿por qué dejar que siga así? Esta demanda es realmente importante porque estamos arrojando luz sobre cosas que importan.

TV: ¿Cuál ha sido la respuesta de la comunidad de la FAMU a la demanda, si críticas o apoyo?

FP: Ha sido refrescante ver que la gente te cubre las espaldas en ciertas cosas. Muchas veces en la escuela los alumnos se quejan unos a otros de algo que podríamos arreglar. Ha sido agradable ver que la gente se entera de la demanda y dice: "¿Eres tú? Alguien tenía que luchar por nosotros. Estoy orgulloso de ti por defender algo que a mí no se me ocurrió hacer o me daba demasiado miedo". Es bonito oír incluso de profesores: "Ojalá alguien me hubiera defendido cuando era más joven".

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TV: Como estudiantes de HBCU en Tallahassee, están a minutos del Capitolio del estado, donde se aprueban políticas que los afectan directamente. Recientemente, ha habido un aumento en el discurso en torno a la "Ley Stop W.O.K.E." del gobernador DeSantis, partes de la cual fueron bloqueadas por un tribunal federal, ya que podría afectar la forma en que los cursos de HBCU examinan la raza y el mundo que los rodea. ¿Cómo les afecta esto a ustedes, estudiantes que están tratando de promulgar el cambio mientras otras políticas perjudiciales también están avanzando?

NS: Siempre va a haber algún tipo de adversidad para aquellos que están tratando de hacer un cambio. Con el gobernador DeSantis tratando de implementar proyectos de ley que perjudican a nuestro pueblo, no debe cambiar la dirección de nuestro objetivo, que es tener la liberación como estudiantes y afroamericanos. Solo tenemos que mantenernos enfocados y determinados.

TV: Si pudiera contemplar su campus dentro de 20 años, ¿qué soluciones le gustaría ver implantadas para la próxima generación de estudiantes?

NS: Quiero que se amplíe nuestro campus. La Universidad Estatal de Florida ocupa la mayor parte [del espacio del campus en] Tallahassee. Si vas a tiendas y restaurantes locales, tendrán parafernalia de la FSU, banderas y arte mural. Cuando buscas la representación de la FAMU y no está, nos hace pensar: ¿Qué hemos hecho? Con esa expansión vendrá el reconocimiento y el respeto, porque lo necesitamos como estudiantes. Una vez que nos ampliemos, podremos contar con diferentes instalaciones y recursos. Con suerte, aumentará el personal de nuestro departamento de ayuda financiera.

FP: Como estudiante de STEM, espero que se amplíen los programas. Veo que muchos estudiantes vienen aquí y quieren especializarse en algo, pero no pueden porque los programas son muy pequeños y carecen de fondos. Ojalá tuviéramos más oportunidades de cursar diferentes carreras.

Ojalá tuviéramos más profesores. Me licencié en Química, pero la gente no sabía lo difícil que era. Si suspendíamos una asignatura, nos podían retrasar un año entero porque algunas de nuestras clases sólo podían impartirse una vez al semestre porque no teníamos suficientes profesores. No teníamos margen de maniobra para equivocarnos.