Hola, ¿cómo estás? Una inquietante exploración de la enfermedad mental
"Hola, ¿cómo estás? / Cada mañana se levantaba/ Temiendo cada momento que tenía que estar despierto".
Con esta letra inicial, Daniel Johnston nos sumerge en el trágico mundo de su proyecto musical más reconocido e igualmente controvertido, "Hi, How Are You: The Unfinished Album".
La cinta mixtape, grabada en el apartamento de la hermana de Johnston, fomenta una atmósfera inquietantemente dulce. Las voces difusas y caprichosas de Johnston y la instrumentación de baja fidelidad aportan a las canciones una nostalgia parecida a la de las canciones infantiles, con personajes extravagantes y diálogos juguetones que refuerzan la presencia de la ingenuidad infantil en su voz. Sin embargo, el desgarrador lirismo del álbum tuerce el brazo de su ambiente, por lo demás inocente. Con canciones que abarcan desde la ansiedad hasta el trastorno bipolar, pasando por la esquizofrenia, "Hi, How Are You" personifica las luchas de toda la vida de Johnston con la enfermedad mental.
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Grabado en fragmentos improvisados en medio de un ataque de nervios, el álbum refleja el estado mental de Johnston en su máxima expresión. En el primer tema, "Poor You", el artista expresa su fracaso a la hora de comunicar a los demás su lucha contra la depresión: "Nadie te entiende/ Pobre de ti, pobre de ti", y recuerda al alienígena bobalicón de la portada del álbum, Johnston anhela que le abran los oídos y le acepten, pero una y otra vez se encuentra alienado, despreciado y dejado de lado con poco más que una falsa mirada de compasión.
"Hola, ¿cómo estás?" no sigue un camino lineal hacia la recuperación, como el retrato en blanco y negro de las enfermedades mentales que suele verse en los medios de comunicación convencionales. El estado mental de Johnston fluctúa a lo largo de sus piezas: En "I am a Baby in My Universe", el cantante se regodea en el éxtasis fugaz de la juventud, una ardiente oleada de confianza que se desmorona por completo en la siguiente pista. Esta inestabilidad se repite a lo largo del álbum: canciones como "Walking The Cow", "Hey Joe" y "No More Pushing Joe Around" muestran un nivel de esperanza y positividad, mientras que "Despair Came Knocking", "Running Water" y "Desperate Man Blues" evidencian un agudo descontento con la vida y sus cargas. No obstante, la obra está unificada por una ineludible presencia de malestar mental. Una pesada envoltura de melancolía envuelve todas las letras optimistas, amortiguando los picos y los valles de la montaña rusa de emociones que el artista experimentó en la creación de este álbum.
El proyecto atemporal de Johnston describe la enfermedad mental con una crudeza nunca vista en la industria musical. Sus letras, honestas y vulnerables, junto con una producción desordenada, resultan muy fáciles de entender para los oyentes que han experimentado la depresión y evocan la empatía de los que no la han padecido. La respuesta a este disco ha sido muy polarizada, lo cual es comprensible. "Hi, How Are You" arroja a los oyentes bajo el implacable asedio de la depresión, con fuertes temas de autocompasión, arrepentimiento, alienación y desesperación. Sin embargo, al poner en armonía los himnos de la esperanza y el desamor, al retirar la manga para revelar las cicatrices que salpican su piel, Daniel Johnston nos ofrece una respuesta más que sincera a la pregunta: Hola, ¿cómo estás?
